lunes, febrero 02, 2009

Una Palabra diaria con Dios...

Reconstruir a la manera de Dios es imposible sin un manual del usuario. Por eso Dios nos dió la Biblia.
Alguien, cierta vez, describió la Biblia como las instrucciones básicas antes de dejar esta tierra. Cuando yo estaba recién aprendiendo acerca de Dios, me tenía que aferrar a su Palabra y su justicia para permanecer puro y verdadero. Era mi única esperanza:
“Estoy completamente desanimado, yaciendo en el polvo. Reavívame por tu palabra. Me sujeto a tus mandamientos y los sigo tan de cerca como puedo. Señor, no me dejes echar a perder todo. Si tan sólo me ayudas a querer tu voluntad, entonces yo seguiré tus leyes aun más de cerca.” (Salmo 119:25, 30-32, Biblia al Día)

Cuando estés echado en el polvo, con tu vida diezmada por lo que tú u otra persona hicieron, hay sólo una esperanza: la Palabra de Dios. Las escrituras nos recuerdan que si nos aferramos fuerte a los mandamientos de Dios, Él nos puede ayudar a cumplir su voluntad.

EL ÉXITO SIGNIFICA CONSTANTEMENTE RECONSTRUIR
La mejor manera de reconstruir es hacerlo de acuerdo al diseño de Dios. Nunca lo lamentarás. Cuando salgas de un mal pasado o de una mala situación, el Señor te tomará justo donde estás y comenzará su proceso de reconstrucción. Recuerda los tres pasos no negociables para la reconstrucción:

1. Toma la decisión de reconstruir.

2. Escoge ir primero.

3. Reconstruye de acuerdo con la Palabra y a la manera de Dios.

No hay otra manera. Entonces ¿por qué no hacerlo?
“Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, Ni han subido en corazón de hombre, son las que Dios ha preparado para los que le aman.” (1 Corintios 2:9)
Escrito por Wayne Cordeiro.

No hay comentarios: