jueves, junio 07, 2012

Jesús: Idolo o Dios?

Lo opuesto a la adoración no es indiferencia, es idolatría. El motivo es porque, como establecimos, todos los seres humanos, en todo momento de nuestras vidas, hoy y en la eternidad, estamos constantemente adorando algo.
La adoración es: conocimiento de Dios bíblicamente correcto combinado con una respuesta bíblicamente correcta hacia Él. Tomate un momento para leer esta frase nuevamente. “conocimiento de Dios bíblicamente correcto combinado con una respuesta bíblicamente correcta hacia Él”. Por el contrario, la idolatría es conocimiento de Dios bíblicamente incorrecto y/o una respuesta bíblicamente incorrecta hacia Él.
Piénsalo. Usaré un ejemplo imperfecto para ilustrar este punto. Imagina que quieres comprar una casa y leyendo el anuncio del vendedor de la casa te gustó porque al leerlo entendiste que tenía un patio de 500 m2, 3 baños y alberca, vista al mar y además la casa cuesta $100,000. Trabajaste duro durante muchos años para juntar el dinero. Dejaste de hacer muchos gastos para poder ahorrar $100,000 para comprar tu casa. Finalmente, consigues el dinero, vas con el vendedor y te encuentras con la sorpresa que no entendiste el anuncio. La casa no estaba en venta, estaba en renta por $100,000 al mes. Al no entender correctamente el anuncio (lo que leíste) tuviste como meta algo que no era cierto o simplemente alejado de la realidad.
Así es con Jesús. Jesús es el nombre que resuena en cada silaba contenida en las Escrituras. Entender quien realmente es Jesús es lo que va a definir nuestra vida como cristianos. Si leemos la Biblia y lo que interpretamos, lo que entendemos acerca de Él es correcto, entonces nuestro objeto de adoración es verdadero, y por lo tanto lo que hacemos es adorar al único Dios. Si por el contrario, leemos y entendemos lo que queremos, y creamos a Jesús a nuestra imagen y semejanza, estamos adorando algo que no es Jesús y por lo tanto es un ídolo.
1 Juan 5:21 nos da a Juan, casi en un tono de ruego: apártense de los ídolos. En otra traducción dice: aléjense de todo lo que pueda ocupar el lugar de Dios en el corazón.
La forma más fácil de saber si a quien adoramos es Jesús es viendo nuestras vidas y si hemos sido transformados. La consecuencia inevitable de conocer y adorar al Jesús verdadero de la Biblia es si nuestras vidas están siendo transformadas gradualmente y nos parecemos más a Jesús:
2 Corintios 3:18: Así que, todos nosotros, a quienes nos ha sido quitado el velo, podemos ver y reflejar la gloria del Señor. El Señor, quien es el Espíritu, nos hace más y más parecidos a él a medida que somos transformados a su gloriosa imagen.
Romanos 1:23 resume lo que nos sucede cuando no entendemos quién es Jesús:
Cambiaron la gloria del Dios incorruptible por una imagen en forma de hombre corruptible.
Yo he sido culpable de hacer esto muchas veces. A veces olvido que Jesús no es como yo y comienzo a ponerle atributos míos. A veces pienso que Jesús es débil porque no detiene las injusticias de este mundo y se me olvida que es poderoso y sabio y decide no aplastarnos por nuestra maldad. A veces pienso que no le importo porque a veces las cosas no me salen bien, y no me fijo en lo egoísta que soy por no reconocer que a cada paso Él ha estado conmigo. A veces pienso que yo sé más que Jesús porque ha puesto líderes arriba de mí con quienes no estoy de acuerdo y me enojo con ellos y con El y se me olvida que Dios está tratando de aplastar mi orgullo y quemarlo para siempre.
Jesús es perfecto, es valiente, fuerte, paciente, sabio, masculino, tierno, guerrero, protector, humilde, inteligente, compasivo, creativo, fiel, formal y divertido.
Si El me promete que puedo realmente conocerle un poco más todos los días es porque así es. Finalmente, tenemos las formas de adorar. Mucho se ha dicho al respecto de las expresiones de adoración. De lo que se puede y no se puede. El balance es este:La Biblia da parámetros de orden, liderazgo, autoridad, expresiones musicales porque confía en que nosotros como líderes haremos TODO lo posible por conocer y adorar al Jesús verdadero según nuestra cultura, nivel socioeconómico y educativo nos permita.
La Biblia intencionalmente no prohíbe faldas o cierto tipo de canciones porque lo más importante es Jesús y todo lo demás es aparte.
Quisiera dejarles con una reflexión y una pregunta a todos nosotros:
He escuchado a muchos (y yo soy uno de ellos) que dicen que conectan mejor con Dios a través de la música. Eso me parece muy bien, pero últimamente me he preguntado si no es egoísta de mi parte decir que esta es mi forma de adorar a Dios y si un día no hay música o no esta tan buena, tengo dificultades para adorar (lo cual también me ha pasado). He llegado a la conclusión de que pensar que la música es un ‘canal’ por medio del cual se adora a Dios es riesgoso porque entonces nos olvidamos del único canal del que la Biblia habla y es el Espíritu Santo. La música es una herramienta. Otra vez, no estoy diciendo que la música este mal, estoy planteándome esta pregunta:
Si yo como músico o cantante, un día descubro que ya no puedo tocar o cantar o que un día la música ya no existiera, cómo adoraría a Jesús? Cómo le conocería? Cómo operaría el Espíritu Santo en mi vida sin música? Yo le dejaría? Qué haría?
D.A